Edición: Julio 2010

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Un lugar para disfrutar Las Grutas todo el año

Si bien el hostel está abierto todo el año, la mayoría de los visitantes llegan en los meses de diciembre, enero y febrero, e incluso algunos días de marzo, relata Juan, propietario y administrador de este alojamiento.

Él llegó con su familia luego de treinta años de trabajar en San Nicolás, en una fábrica de aceros, y este cambio fue porque nunca dejaron de soñar con “su lugar en la Patagonia”. El lugar fue proyectado por su hijo (ingeniero) y construido desde cero. Según explican, eso permitió dotarlo de comodidades que no son fáciles de encontrar en otros edificios reformados. Por ejemplo, todas las habitaciones -ocho en total- con baño privado. A ellas se suman casi 200 metros de espacios comunes.

Los servicios en detalle abarcan tres habitaciones matrimoniales a las que puede agregarse una cucheta, y cinco habitaciones grupales de cinco y seis camas, que son las compartidas. La cocina tiene todos los elementos, y hasta horno pizzero. A la sala de estar y el comedor donde caben 50 personas se suma una salita de juegos. Todo el lugar tiene wi fi, y las habitaciones dobles cuentan con TV. El hostel también atiende a contingentes, para los que se ocupan de los servicios de comida, organizan traslados y coordinan excursiones con agencias locales. Además, el lugar tiene una terraza con vista al mar dotada de una parrilla, que es de uso libre.

La tarifa incluye el desayuno, la provisión de sabanas, toallas y frazadas, agua caliente las 24 horas, lockers individuales y depósito de equipajes.

La creciente internacionalización de la Patagonia hace que reciban todo tipo de viajeros, tanto nacionales como extranjeros. También cuentan que reciben muchos turistas solos, grupos de amigos y parejas que quieren disfrutar las playas de Las Grutas.

Según cuenta Juan, el hosteling es una forma de alojamiento de notable crecimiento en Argentina. “Está siendo descubierto por una buena cantidad de argentinos que teníamos por cultura generacional un concepto diferente de lo que es esto. Los jóvenes, en cambio, la tienen más clara y saben cómo funciona. Ni que hablar de los extranjeros, sean estos jóvenes o mayores”. En Las Grutas sólo hay dos alojamientos de este tipo, y Juan agrega que para ellos “fue una buena forma de conocer gente y hacer amigos, porque la vida del hostel es distinta a la de hoteles u alojamientos. Acá se conoce gente, se charla con ellos y hasta se comparten comidas, asados, se organizan juegos”.

Esta forma de relacionarse con los huéspedes ha generado un anecdotario muy rico, gracias a las situaciones vividas con muchos de quienes han pasado por el lugar. “Las más frecuentes pasaron con extranjeros como algún iraquí o japoneses que no hablaban ni castellano ni inglés. Te imaginás las cosas insólitas que suceden cuando te comunicas con señas con alguien de una cultura totalmente diferente!”, cuenta Juan.

Hostel Huinca Che
hostelhuincache@gmail.com
03461-15693504
Las Dunas 250 - Las Grutas
www.hostelhuincache.com.ar

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