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El Bolsón: un lugar con alma hippie

Airelibredigital.com » Destinos
Autor: Pablo Pleticha, Julio 2016

En estos últimos años este destino se ha convertido en una especie de “Meca” donde los jóvenes se reúnen y toman contacto con otro estilo de vida del que están acostumbrados. ¿Qué es lo que hace diferente al Bolsón?, ¿por qué aparece esa vibración tan particular? 

 

Panoramica Bolsón

 

El Bolsón es uno de los valles más amplios de los tantos que se encuentran paralelos a la cordillera de los Andes. Se ubica entre ésta y el imponente Cerro Piltriquitrón, en cuyo faldeo se recuesta Villa Turismo, zona residencial y prestadora de variados servicios. La ciudad está en la provincia de Río Negro, a 1695 kilómetros de Buenos Aires y a sólo 122 de San Carlos de Bariloche.

 

Plaza Pagana Bolson

En este lugar se respiran otros aires, aires muy particulares que parecen trasladarnos en el tiempo. Apenas pisamos el lugar comenzamos a sentir que algo pasa, que una onda muy particular invade nuestro ser. A pocas cuadras de allí nos encontramos con la Plaza Pagano y todo comienza a cerrar: la manera en que la gente se saluda, las charlas que se arman en el momento, muchas sonrisas y una “vibra” especial que nos traslada a la época de los hippies.

 

Es que transitar como si el reloj no corriera, encontrar paños tirados en la plaza con artesanías espectaculares, o un grupo de personas entonando alguna canción a coro acompañados con una guitarra, no parece muy de esta época. Pero todo tiene una explicación.

 

Néstor Quisle, representante de la Secretaría de Turismo de El Bolsón, cuenta que a fines los sesenta y principios de los setenta, comenzaron a asentarse en el lugar varios grupos de hippies nacionales que, junto con los lugareños, generaron una movida cultural a favor de la ecología y la igualdad social muy importante. En este lugar hay un aire de protesta del modo de vida capitalista: solidaridad y amabilidad son otros componentes que podemos encontrar en la gente que habita la localidad.

 

Feria Artesano Bolson

 

A partir de esta movida cultural nació la famosa Feria Regional de El Bolsón, a fines de los setenta. Según uno de sus fundadores, Agustín Porro, fue un hecho “efímero y espontáneo”, aunque actualmente este evento es uno de los más importantes y reconocidos en el sur: si bien en temporada baja tiene cerca de 40 puestos, en temporada alta alberga hasta 600. Allí se puede encontrar obras de todo tipo trabajadas en madera, hilo, vidrio, metal o cerámica. Además, cuenta con un sector de comidas que permite disfrutar de algún bocadillo, o de los famosos dulces de frutas finas, todo acompañado por una sabrosa cerveza artesanal, otra atracción imperdible de El Bolsón. Néstor nos dice: “En este lugar convocante por su pluralidad de producción y artesanías, convergen expresiones artísticas de la mas variadas: titiriteros, payasos, malabaristas, músicos, estatuas vivientes, festivales de clown, de jazz, de música electrónica, con artistas locales de reconocida trayectoria. Todo esto sucede en su gran mayoría realizado por jóvenes que encuentran en El Bolsón un lugar donde se respira arte, libertad de expresión y naturaleza; con acceso libre y con la modalidad -también artística- del cobro ‘a la gorra’, tan común en este tipo de espectáculos”.

 


Rafting Bolson
Todo el año le sienta bien al Bolsón. Su hermoso paisaje va mutando de formas y colores a medida que las estaciones aparecen. Por ello tiene preparado un conjunto de actividades que acompañan el clima. En invierno vemos un paisaje nevado que se vuelve muy apropiado para practicar esquí en el cerro Perito Moreno, ubicado a 25 kilómetros del centro. Este lugar cuenta con un refugio para 60 personas, además de una confitería - restaurante para 100. Lo que resta del año se realizan todo tipo de actividades que tienen como fin un contacto íntimo con la naturaleza. Entre las más destacadas se encuentran las cabalgatas por la comarca, trekking sobre los cerros, espléndidas caminatas por las montañas; mountain bike; rafting por el Río Azul o por el Río Manso; o parapente desde el Cerro Piltriquitrón a 1000 metros de altura.

 

Muchos dicen, y con razón, que no se puede dejar de visitar El Bolsón en otoño. Una mezcla de colores rojizos, amarillos y ocres generan un paisaje de cuento de hadas. Además, el clima no es tan frío como se puede suponer. Aunque la feria y el movimiento turístico disminuyen un poco en relación con el verano, los circuitos se mantienen a la espera de los visitantes, mostrando una paleta de colores que hacen que con cada estación este lugar sea una nueva obra de arte.

 

Rio Azul Mirador

 

En cuanto a los alojamientos, vale decir que El Bolsón tiene una buena infraestructura en materia de campings y albergues. El pueblo cuenta con casi 22 campings muy bien equipados, con agua caliente las 24 horas, aunque muchos sin toma corrientes. También hay excelentes hostels y albergues.

 

Para más información se puede consultar http://www.acampante.com/listado/campings/el-bolson/rio-negro / http://www.turismoelbolson.gob.ar

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